jueves, 14 de julio de 2011

Juan Pérez Zedillo

Tiene 42 años, creció en Nebaj, Quiché y habla cuatro idiomas nacionales. Ixil, quiché, kanjobal y kaqchiquel, además de castellano. Militó en el Ejército Guerrillero de los Pobres desde los 14 años y vivió en la Comunidad de Población en Resistencia de la Sierra luego que su padre y su abuelo fueran quemados, vivos, por el Ejército junto a otras 55 personas mientras oraban dentro de una iglesia de madera. 

Ha dedicado su vida a organizar a quienes padecieron la violencia y hoy es presidente de la Asociación de Víctimas de Chimaltenango. Persigue con denuedo el pago del resarcimiento para quienes fueron perseguidos por el Ejército, pero también para quienes sufrieron a causa de una acción guerrillera. 

Estudió derecho y está ya a punto de graduarse. Pero entre una cosa y otra, se ocupa de lograr la exhumación de más de 120 cadáveres que se encuentran enterrados en una fosa clandestina junto al rastro de San Martín Jilotepeque.

No hay comentarios:

Publicar un comentario